La sífilis en el embarazo puede perjudicar al bebé por el riesgo de transmitir la infección al niño a través de la placenta, lo que puede provocar graves problemas de salud, como pérdida de audición, discapacidad visual y problemas neurológicos u óseos.
La identificación de la sífilis en el embarazo se puede realizar inicialmente a través de síntomas como lesiones en la región genital o manchas rojas en el cuerpo; Sin embargo, generalmente están indicados análisis de sangre como VDRL o FTA-Abs para confirmar el diagnóstico.
Si se sospecha sífilis durante el embarazo, es importante consultar a un obstetra para su evaluación e iniciar el tratamiento adecuado, que generalmente implica la inyección de penicilina. Mediante un tratamiento adecuado es posible prevenir la transmisión de la sífilis al bebé.
Síntomas de sífilis en el embarazo.
Los síntomas de la sífilis en el embarazo incluyen:
- Herida en la región genital, que puede desaparecer en 3 a 6 semanas, incluso sin tratamiento;
- Manchas rojas en la piel;
- Pérdida de cabello;
- Placas parecidas a verrugas en la región íntima.
En determinados casos, también puede haber descamación de la piel, dolor de cabeza, dolores musculares, dolor de garganta y malestar general. Vea más detalles sobre los síntomas de la sífilis.
Para confirmar el diagnóstico de sífilis en el embarazo pueden estar indicados análisis de sangre como el VDRL o el FTA-Abs, que pueden identificar anticuerpos en la sangre contra las bacterias que causan la sífilis. Vea qué es el examen VDRL y cómo entender el resultado.
Prueba en línea sífilis
Si tienes síntomas de sífilis, selecciona los siguientes y conoce tu riesgo de padecer esta enfermedad:
Esta prueba es una herramienta que sirve únicamente para brindar orientación, por lo que no pretende brindar un diagnóstico y no reemplaza una consulta con el obstetra.
Consecuencias de la sífilis en el embarazo
Las consecuencias de la sífilis durante el embarazo son más habituales en mujeres que no realizan el tratamiento correcto. En este caso, el riesgo de transmitir la sífilis al bebé a través de la placenta o el canal del parto es mayor y el bebé puede desarrollar sífilis congénita.
Otra complicación grave de la sífilis para las mujeres embarazadas es la neurosífilis, en la que se infectan el cerebro y la médula espinal, lo que puede provocar daños en el sistema nervioso como parálisis o ceguera. Vea más sobre qué es la neurosífilis y su tratamiento.
Principales riesgos para el bebé
Los principales riesgos de la sífilis para el bebé son:
- Nacimiento prematuro;
- Muerte fetal;
- Bajo peso al nacer;
- Manchas en la piel;
- Alteraciones en los huesos;
- Fisuras cerca de la boca;
- síndrome nefrótico;
- Edema;
- Convulsiones;
- Meningitis;
- Deformación de la nariz, dientes, mandíbula o paladar;
- Sordera;
- Dificultad de aprendizaje.
La sífilis en el embarazo es grave principalmente si la infección se encuentra en la fase inicial, donde es más transmisible, aunque la infección puede ocurrir en cualquier fase del embarazo. El bebé también puede infectarse durante el parto normal, cuando hay una herida de sífilis en la región vaginal.
La mayoría de los bebés infectados no presentan ningún síntoma al nacer, por lo que se puede indicar la prueba VDRL periódicamente después del nacimiento y el tratamiento se inicia inmediatamente después de que se descubre la enfermedad.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento de la sífilis en el embarazo debe ser indicado por el obstetra y normalmente se realiza con inyecciones de penicilina en 1 o 3 dosis, dependiendo de la gravedad y duración del contagio:
- Sífilis primaria, secundaria o latente reciente (hasta un año de evolución) en el embarazo: 1 dosis única de penicilina;
- Sífilis latente tardía (con más de un año de evolución): 3 dosis de penicilina, una por semana;
- Sífilis latente de duración desconocida: 3 dosis de penicilina, una por semana.
Es muy importante que la embarazada complete el tratamiento para evitar transmitir la sífilis al bebé. Así, si el tratamiento no es completo, se recomienda consultar a un obstetra, quien podrá indicar iniciar nuevamente el tratamiento. Vea cómo se realiza el tratamiento de la sífilis.
Asimismo, también se recomienda que la pareja se someta a tratamiento y evite tener relaciones desprotegidas durante el periodo de tratamiento para evitar que la mujer vuelva a infectarse y ponga en riesgo al bebé.
Después del nacimiento del bebé, es importante consultar al pediatra para una evaluación y, de ser necesario, también realizar el tratamiento con penicilina indicado para el bebé. Obtenga más información sobre la sífilis congénita y cómo identificar los síntomas.
Efectos secundarios del tratamiento en mujeres embarazadas.
El tratamiento con penicilina puede provocar en la embarazada algunos efectos secundarios como contracciones, fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares, dolores articulares, escalofríos y diarrea, siendo importante informar al médico en caso de que surjan.
Para reducir la fiebre y los dolores de cabeza, la mujer puede colocarse una compresa con agua fría en la frente. Para los dolores musculares y articulares una buena opción es darse un baño caliente o recibir un masaje relajante. Asimismo, el paracetamol también puede ayudar a paliar estos efectos secundarios, pero debe utilizarse con precaución.
En caso de diarrea, un buen consejo es comer yakult, ya que este yogur contiene lactobacilos vivos que ayudan a regular el intestino, y beber mucha agua para hidratar el organismo y compensar las pérdidas de agua.
Mujer embarazada alérgica a la penicilina
El tratamiento de la sífilis en mujeres embarazadas alérgicas a la penicilina se puede realizar con otros antibióticos como ceftriaxona, por ejemplo; Sin embargo, actualmente no existen otros antibióticos además de la penicilina que garanticen el tratamiento tanto para la madre como para el bebé.
Por esta razón, es importante consultar a un obstetra en caso de sospecha de alergia a la penicilina para su evaluación. En determinadas ocasiones puede estar indicado un tratamiento para la alergia.
Signos de mejora y empeoramiento.
Los signos de mejoría de la sífilis durante el embarazo incluyen la reducción o desaparición de las heridas en la zona íntima, así como de las lesiones en la piel y la boca, si están presentes, y una disminución de la inflamación y del dolor en los ganglios linfáticos.
Los signos de empeoramiento incluyen aumento de heridas en la zona íntima, aparición o aumento de lesiones en la piel y la boca, agrandamiento de los ganglios linfáticos, fiebre, rigidez muscular y parálisis de las extremidades.