La prostatitis es la inflamación de la próstata, una glándula del sistema reproductor masculino ubicada justo debajo de la vejiga y rodea la uretra.
Esta inflamación puede provocar diversos síntomas, como agrandamiento de la próstata, dolor, ardor al orinar y fiebre. La prostatitis puede aparecer de forma repentina o ser crónica, y su principal causa es la infección bacteriana, siendo las bacterias más comunes Escherichia coli, Klebsiella spp. y Proteus spp.
Sin embargo, existen varios tipos de prostatitis, por lo que el tratamiento debe ser determinado por un urólogo, dependiendo de la causa. Esto puede incluir el uso de antibióticos, analgésicos y antiinflamatorios.
Síntomas principales
Los síntomas de la prostatitis son:
- Inflamación de la próstata.
- Disminución de la fuerza del chorro urinario.
- Dolor o ardor al orinar.
- Dificultad o esfuerzo para orinar.
- Aumento de la frecuencia urinaria.
- Dolor al tener relaciones sexuales o eyacular.
- Dolor en el pene, escroto, testículos o perineo.
- Fiebre y escalofríos, cuando son causados por una infección.
- Sangre en la orina.
- Sangre en el esperma.
Lea también: Dolor en los testículos: 10 causas y que hacer
tuasaude.com/es/dolor-en-los-testiculos
Sin embargo, varios de estos síntomas también pueden ser síntomas de una infección del tracto urinario en los hombres, por lo que es importante acudir a un urólogo para una evaluación médica.
Prueba de síntomas en línea
Dado que los síntomas de la prostatitis son similares a los de otros problemas de próstata, selecciona los síntomas que presentas en el test a continuación y conoce tu riesgo de tener un trastorno de la próstata:
Esta prueba es sólo una herramienta indicativa y no reemplaza una evaluación médica realizada por un urólogo.
Causas y tipos de prostatitis.
La prostatitis se puede clasificar según su causa en bacteriana o no bacteriana, y según la duración y momento de inicio de los síntomas, en aguda o crónica, como se describe a continuación:
Aunque la prostatitis aguda y crónica presentan síntomas similares, la prostatitis aguda puede volverse crónica si los síntomas persisten durante más de tres meses.
Cómo se hace el diagnóstico
El diagnóstico de prostatitis lo realiza un urólogo, quien evalúa los síntomas de la persona y realiza un examen físico, que incluye un tacto rectal para buscar signos de inflamación o irregularidades en la próstata.
Lea también: Tacto rectal: qué es, para qué sirve y cómo se realiza
tuasaude.com/es/tacto-rectal
Además, el médico puede ordenar diversas pruebas, como análisis de sangre (hemograma y PSA), análisis de orina, uroflujometría y cultivos de semen o secreciones prostáticas, con el fin de identificar posibles infecciones bacterianas.
En algunos casos, también pueden ser necesarias pruebas de imagen, como ecografías o resonancias magnéticas, para descartar otras afecciones. Si el PSA está elevado en personas asintomáticas, el urólogo puede recomendar una biopsia de próstata para descartar la posibilidad de cáncer de próstata.
Tratamiento para la prostatitis
Los tratamientos para la prostatitis varían según la causa y el tipo, y deben ser indicados por el urólogo.
En casos de prostatitis bacteriana aguda, el médico puede recetar antibióticos de amplio espectro, como ciprofloxacino, levofloxacino o doxiciclina, para eliminar la infección. Si se identifican bacterias específicas, el médico puede ajustar el tratamiento con antibióticos según los resultados del cultivo.
En la prostatitis bacteriana crónica, el tratamiento con antibióticos, como ciprofloxacino o levofloxacino, se administra durante un período de 4 a 12 semanas, dependiendo de la respuesta al tratamiento. Sin embargo, si los antibióticos no ayudan a reducir la inflamación, puede ser necesaria la hospitalización para recibir antibióticos por vía intravenosa o, en casos más graves, una cirugía para drenar un absceso de próstata que esté causando los síntomas.
Para aliviar el dolor y la fiebre, su urólogo puede recomendarle analgésicos y antiinflamatorios no esteroides (AINE), como el ibuprofeno.
En el síndrome de dolor pélvico crónico, se pueden recetar alfabloqueantes, como la tamsulosina, que ayudan a relajar los músculos de la próstata y la vejiga; fisioterapia del suelo pélvico; medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE); antidepresivos, ansiolíticos y terapia cognitivo-conductual para el manejo del estrés y la ansiedad.
La prostatitis inflamatoria asintomática no requiere tratamiento.
Lea también: ¿Cómo se trata la prostatitis?
tuasaude.com/es/tratamiento-de-prostatitis
Preguntas comunes sobre la prostatitis
Algunas preguntas comunes sobre la prostatitis son:
1. ¿Puede la prostatitis curarse sola?
La prostatitis no suele curarse por sí sola y, en la mayoría de los casos, requiere tratamiento médico para aliviar los síntomas y tratar la causa subyacente. Sin embargo, la evolución de la prostatitis depende del tipo que se padezca.
2. Si tienes prostatitis, ¿puedes contagiar a tu pareja?
Si tienes prostatitis bacteriana, ya sea aguda o crónica, especialmente cuando está relacionada con infecciones de transmisión sexual, es posible transmitir la infección a tu pareja a través del contacto sexual. En estos casos es imprescindible el uso de preservativo y evitar las relaciones sexuales hasta haber finalizado el tratamiento y erradicada la infección.
En los casos de prostatitis crónica asintomática, no bacteriana o inflamatoria, no hay riesgo de transmisión, ya que estas formas no son causadas por infecciones que puedan propagarse.
3. ¿Cuál es el mejor antibiótico para la prostatitis?
El mejor antibiótico para tratar la prostatitis depende del tipo y causa de la infección. Para la prostatitis bacteriana aguda y crónica, las fluoroquinolonas como la ciprofloxacina y la levofloxacina suelen ser los antibióticos de elección. Si se trata de una prostatitis no bacteriana, los antibióticos no son necesarios.
Es importante seguir las recomendaciones del médico para recibir el tratamiento adecuado, ya que un tratamiento incorrecto o incompleto puede provocar complicaciones.